Los eficientes sistemas de aire acondicionado con que cuenta el transporte público y de larga distancia, requieren mantener las ventanas cerradas para no perder la climatización. Sin embargo, además de lograr confort, esto puede significar falta de aire limpio y fresco.
Cualquier espacio cerrado es más propenso a la acumulación de gérmenes y bacterias, en especial si no está bien ventilado. Por este motivo es importante ventilar, sin embargo, las condiciones climáticas no siempre favorecen esta acción. Purificar el aire ayuda a eliminar malos olores, mantener el aire libre de virus, eliminar agentes que pueden ser dañinos para la salud como el polvo, polen u otras partículas.
Alguna vez te has preguntado, ¿qué tan seguro es el aire que respiramos en interiores? Existe una tendencia equivocada a pensar que el aire exterior está más contaminado que el interior, sin embargo no siempre es así.
Lo cierto es que los espacios cerrados también presentan agentes contaminantes y a diferencia de los espacios abiertos, se pierde la capacidad de recirculación y ventilación.
La pandemia dejó al descubierto que el transporte de pasajeros es un importante foco de contagio de enfermedades debido a la gran cantidad de personas que lo usan diariamente.
Es por eso que es importante buscar opciones que permitan limpiar y recircular el aire en medios de transporte masivos y de esta manera garantizar un ambiente seguro que reduzca el riesgo de contagio de enfermedades respiratorias.
“El cuidado de la calidad del aire es un aspecto que tiene gran desarrollo en el interior de edificios pero no en vehículos de transporte. Sin embargo, la sensibilización de la opinión pública al respecto es creciente y hay ejemplos en países asiáticos, donde los usuarios no aceptan subir a un taxi si éste no dispone de un sistema de purificación.”
Diario de Sevilla
Una de las mejores formas de garantizar un ambiente seguro en el transporte público es instalando purificadores de aire, estos permitirán controlar olores y mejorar 100% la calidad del aire, además funcionan como agente sanitizador para las superficies.
Entre los beneficios generales de un purificador se destaca que:
Eliminan malos olores
Mejoran 100% la calidad del aire
Higienizan las superficies
Eliminan de gérmenes en lugares críticos
Mejoran la percepción del lugar.
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